En la Cordillera Cantábrica, en el límite entre Asturias y León, se encuentra la Reserva de la Biosfera del Valle de Laciana, un lugar que esconde lugares patrimoniales y bosques y sendas espectaculares para todos los públcios. En esta ocasión será la ruta de los Tejos de Rioscuro la elegida para mostrarte la belleza del Valle de Laciana.
Es una ruta circular apta para realizarla con niños pequeños (siempre que estén acostumbrados a andar), ideal para pasar una jornada inmerso en los bosques de León y contemplar a estos grandes árboles, sin duda es algo que no te dejará indiferente, pues compartir unos momentos de tu vida, con un ser vivo con mas de 1000 años de edad es una experiencia que recordarás por siempre.
VALLE DE LACIANA
El lugar en el que se ubica esta ruta está en La Reserva de la Biosfera de Laciana que está situada en la cabecera del río Sil, en la Cordillera Cantábrica, al norte de la provincia de León. Pertenece a la comarca de los Cuatro Valles, encontrándose en su totalidad dentro del término municipal de Villablino, municipio de tradición minera que ha diversificado su economía hacia el turismo y que esconde en su término municipal multitud de lugares para conocer la naturaleza en estado puro.
El Valle de Laciana, se encuentra también dentro del Espacio Natural de la Sierra de Ancares y de la Red Natura 2000, como Lugar de Importancia Comunitaria(LIC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) "Alto Sil". Debido a la presencia de importantes poblaciones de oso pardo y urugallo cantábrico, también se encuentra dentro del Plan de Recuperación de estas dos especies.
Si quieres conocer mas rutas en el Valle de Laciana PINCHA AQUí
¿Cómo Llegar al inicio de la Ruta de Los Tejos de Rioscuro?
Por la carretera general, en Rioscuro tomaremos el desvío a LE-493 al Villar de Santiago. En un punto intermedio del trayecto justo donde se encuentra un punto marcado con un panel informativo, dejamos el coche y empezamos la ruta andando, justo aquí.
En la zona del aparcamiento encontraréis este cartel.
El aparcamiento está limitado a unos cuantos vehículos, por lo que te recomiendo madrugar
Tras dejar el coche tomamos la pista en descenso
Encontramos una cancela que atravesaremos por la puerta pequeña de la derecha
Llegamos a la fuente de La Peruchal
Después pasaremos por una intersección donde tomaremos el camino de la derecha, con una pequeña pendiente hasta alcanzar la segunda cabaña.
Continuamos el ascenso hasta una bifurcación donde tomaremos nuevamente el camino de la derecha, por el de la izquierda volveremos.
Características de la Ruta
- Espacio Natural : Reserva de la Biosfera del Valle de Laciana
- Longitud: 7,5 km
- Tipo de ruta: Circular, con una parte de ida y vuelta.
- Desnivel: 460+, 460-
RECOMENDACIONES A TENER EN CUENTA
- No realices esta ruta sino tienes pensado llevarte la basura que trajiste contigo (incluida la orgánica).
- No realices esta ruta si piensas hacer tus necesidades y dejarlo todo lleno de pañuelos y de tus desechos por cualquier sitio, (existe la opción de enterrarlos).
- No realices esta ruta si no estás capacitado/a para ver sin dañar, para fotografiar en vez de arrancar o maltratar.
- No realices esta ruta si piensas esparcir tu basura (aceite de latas de conserva, restos orgánicos, latas, pañuelos..)a alguno de los cursos de agua.
- No realices esta ruta si no te ves capacitado/a para estar en plena naturaleza y que tu voz no sobresalga por encima del canto de los pájaros. (¡No grites!).
- No realices esta ruta si no sabes caminar por el campo sin que se note tu huella.
- No realices esta ruta si piensas que los envoltorios de los geles y las barritas energéticas no son basura.
- No realices esta ruta si te crees que el campo es tuyo y como tal puedes destrozarlo.
- No realices esta ruta si eres incapaz de ver un ser vivo y no dañarlo.
Si te has sentido identificado/a con algún apartado anterior, ya sabes lo que debes hacer, todas las demás personas que no somos como tú y sobre todo el magnífico entorno de los Tejos de Rioscuro y el Valle de Laciana te lo agradeceremos.
Si por el contrario no te has sentido identificado/a, bienvenido/a seas, espero que lo disfrutes con los cinco sentidos y deje en tí un recuerdo que perdure por siempre.
Descripción de la Ruta
Tras dejar el coche tomamos la pista en descenso
No tardamos en estar caminando bajo la sobra de grandes abedules
Seguimos ascendiendo mientras compartirnos el camino con algunos todoterrenos, miles de moscas y muchos turistas que como nosotros quieren conocer los Tejos. Visitar este lugar en verano y con robles cerca tiene estos inconvenientes mosqueriles.
Llegamos a la primera Braña, llamada de Brañarronda.
El camino se transforma en sendero y la densa vegetación cubre el cielo sobre nuestras cabezas
A nuestra izquierda el arroyo nos regala varios saltos de agua y cascadas que tendremos que descubrir aproximándonos a sus orillas por los entrantes que irán saliendo a nuestro paso.
Si nos fijamos veremos alguna indicación de la ubicación de las cascadas mas bonitas
Todo es humedad y exuberancia, en las proximidades del arroyo hay muchos helechos, musgos y líquenes.
Encontramos varios carteles que nos indican donde se encuentran los grandes tejos, aunque incluso así el sendero correcto es difícil de seguir en ocasiones, por lo que deberemos prestar atención a las sendas mas transitadas y a las indicaciones que iremos encontrando.
En algunos tramos el sendero se vuelve algo abrupto, seguramente en otoño e invierno se desdibuje y sea algo mas difícil de encontrar
Llegamos a la zona de los majestuosos tejos, que son enormes , algunos con más de 7 metros de diámetro y 15 metros de altura; por lo que según varias fuentes consultadas pudieran rondar los 1000 años de edad
El tejo era un árbol sagrado para las antiguas tribus celtas que poblaban hace miles de años el norte de la península, posiblemente por su gran longevidad, ya que se creía que era un árbol inmortal ya que de su propio tronco brotan nuevos tejos y da la sensación de no morir nunca. Al parecer se le atribuían propiedades mágicas y bajo él se reunían para rezar a los dioses o para enterrar a sus seres queridos. Con la llegada del cristianismo (que absorbe todo lo anterior como propio), se siguieron manteniendo estos árboles en las cercanías de los cementerios y aún hoy es frecuente ver ejemplares solitarios de tejos en estos lugares.
El Tejo es muy tóxico (contiene un alcaloide venenoso, la taxina), tanto hojas, como tronco, corteza, menos el arilo rojo de su fruto y sólo para las aves no lo es, que son las encargadas de comerlo, pasarlo por los ácidos de su estómago y depositar la semilla ya fértil en algún lugar idóneo para su enraizamiento mediante sus deyecciones.
Estos grandes colosos es muy difícil encontrarlos formando bosquetes monoespecíficos, pero no imposible, en España existe un bosque de Tejos en Galicia que puede ser considerado como tal, muy pronto os pondré por aquí el enlace a esa crónica.
El Tejo (Taxus baccata) es un árbol relicto del jurásico que se encuentra actualmente en vías de extinción, por la mano del hombre principalmente y por ser dioico, es decir, tienen que estar cerca un ejemplar macho y uno hembra para que uno produzca polen y otro óvulos y así pueda producirse la polinización y haya semillas fértiles. En los Tejos de Rioscuro se da esta situación.
Ya que pudimos ver semillas fértiles y pequeños tejos creciendo a la sombra de los padres.
No sólo los tejos adquieren grandes dimensiones en este lugar, en la imagen inferior podéis ver un gran fresno desmochado.
Vemos unas indicaciones que nos conducen a un lugar donde hay "Petroglifos", por lo que decidimos seguirlas.
Y esto es lo que encontramos...
Después de pasar bastante rato en la zona de los tejos, proseguimos la senda y nos encaminamos hacia la Braña de Murias, para hacer la ruta circular. Para llegar hasta esta Braña el sendero se pierde un poco y hay que ir buscando una explanada fuera del denso bosque en el que se encuentran los tejos.
Antes de la Braña encontraremos los restos de lo que pareciera otra Braña anterior.
Hasta llegar a la Braña de Murias, estas brañas eran los lugares en los que pasaban el verano los pastores para aprovechar los pastos para el ganado, son muy comunes en el sur de Asturias y en esta zona del Valle de Laciana.
Son las llamadas Olleras, antiguas construcciones hechas en piedra de la zona, que se localizan cerca de fuentes y zonas frescas con el objetivo de mantener fresca la leche que se guardaba dentro en ollas, hasta que la pudieran bajar al pueblo.
Vamos avanzando en descenso y disfrutando de esta zona en soledad, pues al hacerla circular es difícil que nos encontremos con senderistas por este lugar.
Incluso alguna fuentecilla va quedando a nuestra derecha
Otro puentecito de madera nos devuelve al sendero transitado, a la altura de la segunda Braña que vimos a la ida
Si quieres conocer mas rutas en el Valle de Laciana PINCHA AQUí
Aquí podéis descargar el Track de la Ruta de los Tejos de Rioscuro
Powered by Wikiloc
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Las descripciones contenidas en este blog,son basadas en mis experiencias personales, por lo tanto son subjetivas, tan sólo me gusta viajar y recopilar mis experiencias.
Cuando salgas a la montaña asegúrate de estar preparado para ello y de llevar lo necesario..mas vale que sobre...
¡Gracias por visitar mi blog!