jueves, 18 de diciembre de 2025

Ruta a la Cueva del Yedrón (Sierra Sur de Jaén)

Si has llegado hasta aquí y estás leyendo estas líneas, es porque estás pensando en visitar una de las joyas de la Sierra Sur de Jaén. Un lugar que recuerda a una casa hobbit y que parece sacado de un cuento de hadas. Si es así, has  llegado, sin duda, al sitio correcto. Eso sí, antes de que sigas leyendo, te adelanto algo: en este post no vas a encontrar imágenes explícitas de la Cueva del Yedrón, porque en internet ya tienes todas las que quieras. Si me aceptas una recomendación deja de buscar fotos de lo que te vas a encontrar y permítete llegar con la mirada limpia, dispuesto a sorprenderte. A estas alturas ya sabes que el lugar merece mucho la pena y que no te va a dejar indiferente. Visita la Cueva del Yedrón sin anticiparte, porque la primera vez nunca se olvida.

En este post sí vas a encontrar información práctica y clara para llegar a la Cueva del Yedrón a través de dos rutas diferentes. Ambas comparten el mismo tramo final, pero te permitirán escoger la opción que mejor encaje contigo, según lo que busques, tu condición física y el tiempo del que dispongas. El destino será el mismo, aunque la experiencia no lo será: en cada recorrido disfrutarás de una forma de contacto con la naturaleza única pues tendrás vistas, ritmos y sensaciones distintas.

Además, he incluido imágenes de la ruta, tracks y una explicación detallada del trayecto, con curiosidades y datos de interés. Así, antes incluso de poner un pie en la senda, conocerás mejor el entorno y podrás disfrutarlo todavía más.

¿Me acompañas?



¿Dónde está la Cueva del Yedrón? ¿Cómo llegar a la Cueva del Yedrón?

Aunque la introducción de este post pueda sugerir lo contrario, sí que voy a contarte dónde está este lugar. Además, aparece geolocalizado en Google y, sinceramente, no creo que todo el mundo sea dañino por naturaleza. Me gusta pensar que al igual que todavía hay personas como a las que les debemos la existencia de la Cueva del Yedrón, hay otras muchas capaces de respetar el entorno natural, sobre todo espacios como este que nos tocan por dentro y llegan al alma.

La Cueva del Yedrón se encuentra a unos 1.150 metros de altitud, en la Sierra Sur de Jaén, a poca distancia de Jaén capital. Está ubicada en un entorno de montaña, entre barrancos y lomas, y solo es accesible a pie a través de senderos. Además, se sitúa muy cerca de pasos naturales de la sierra, como el Puerto del Raso y el Puerto del Paso.

¿Qué es la Cueva del Yedrón?¿Qué hace único al Yedrón?

Aunque la Cueva del Yedrón esté rodeada de leyendas y, en los últimos años, se haya envuelta en un halo de misterio, conviene aclararlo: este lugar es una covacha adaptada por la mano del hombre como refugio de montaña.

En los últimos años se ha convertido, además, en una forma de contacto con la naturaleza, un espacio de pausa, silencio y conexión auténtica con el entorno. Y, sobre todo, sigue cumpliendo su función principal: ser refugio para montañeros.

Se ha hecho famoso por la singularidad de la roca que lo cobija, por el entorno, por lo inaccesible del paraje en el que se ubica y por las peculiaridades propias de otras localizaciones, con las que su autor dejando volar libre su imaginación, ha dotado a este lugar de un nombre y de un halo que no deja indiferente y que ha hecho posible que todas y todos podamos disfrutarlo.

 

Características de las Rutas de Subida a la Cueva del Yedrón.

Antes de seguir debes tener en cuenta que estas dos rutas que te muestro no son las únicas que hay, son las dos que yo conozco, pero eso no quiere decir que no haya mas. Por lo que investiga otras opciones si estas dos no te convencen.

Opción 1. Subida circular a la Cueva del Yedrón desde Otiñar.

  • Tipo: Circular
  • Desnivel: 850m
  • Distancia: 15 km


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Punto de inicio de la Ruta 1. Donde aparcar: En explanada que queda a la izquierda conforme dejas el cruce para la Cañada de las Hazadillas. 


Esta ruta es bajo mi punto de vista la mas atractiva de las dos que te propongo, pues pasas por lugares muy interesantes de la Sierra Sur, como los petroglifos del abrigo del Toril o las ruinas del Castillo de Otiñar. La bajada se realiza por la zona conocida como "Senda nueva", finca privada en esta parte. Infórmate si hay alguna actividad cinegética en la zona, sobre todo entre noviembre y febrero.

Opción 2. Subida lineal a la Cueva del Yedrón desde el Parrizoso.

  • Tipo: Lineal.
  • Desnivel: 550m
  • Distancia: 10,5km


Punto de inicio de la Ruta 2. Donde aparco: En el Cortijo de la Castañeda. Hay una zona casi un km antes de llegar al Cortijo de la Castañeda en una curva, que tiene anchura para aparcar pero no es muy grande el espacio y suele llenarse con facilidad.

Esta es la forma más rápida de subir a la Cueva del Yedrón, comparte con la ruta 1 el mismo tramo desde el Puerto del Paso hasta la Cueva ( donde empieza el desnivel mas pronunciado y la senda). Si aparcas el coche en la curva, te quitas dos km y se queda en 8km totales, por lo que tendrás 4 km solamente hasta la cueva. No creas que por ser pocos son fáciles, porque no es asi, ya que siguen siendo 550 metros de desnivel lo que te separa de la cueva y desde el Puerto del Paso te quedarán 250 metros de desnivel en 2 km muy verticales, por sendas de montaña, donde es preciso que tengas buena orientación en algunos tramos ¡Tenlo en cuenta!.




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Descripción de las Rutas de subida a la Cueva del Yedrón. 

Para la descripción de las dos rutas que os planteo que comparten la parte final desde el Puerto del Paso, os describiré a grandes rasgos y por separado el trayecto de cada una de ellas hasta dicho paso, donde a partir del mismo y ya de forma conjunta continuaré el relato hasta la Cueva del Yedrón.

Opción 1. Subida circular a la Cueva del Yedrón desde Otiñar.

Comenzamos la ruta en el Barranco del Toril. 


Petroglifos del Abrigo del Toril.

A los pocos metros de internarnos en el Barranco del Toril, queda a nuestra izquierda el Abrigo del Toril.  Este abrigo natural actúa como una auténtica cápsula del tiempo: sus paredes verticales custodian más de 30 petroglifos neolíticos grabados en bajorrelieve. Aunque podréis distinguir figuras humanas e incluso una «Venus», lo que verdaderamente llama la atención son sus enigmáticos círculos concéntricos y, sobre todo, un penta-semicírculo que los expertos identifican como un calendario solar de hace 4.500 años, perfectamente alineado con el ocaso del solsticio de invierno. 

Abrigo del Toril

¿Qué es exactamente un petroglifo?

Para que no os lieis con los términos: un petroglifo no es una pintura (eso sería una pictografía), sino un grabado sobre la propia roca. La palabra viene del griego petra (piedra) y glyphein (tallar), y eso es literalmente lo que hacían nuestros antepasados: "tatuar" la piedra.

No usaban pigmentos ni pinceles, sino que desgastaban la superficie rocosa mediante percusión (golpeando piedra contra piedra) o abrasión (rayando o frotando) para sacar a la luz la capa interior, que suele tener un color diferente. Es decir, es un dibujo en relieve negativo. Lo fascinante de los del Abrigo del Toril es pensar en la paciencia que tuvieron para tallar esos surcos hace miles de años, dejándonos mensajes que, como ese calendario solar, todavía estamos intentando descifrar. 

Fuente: Blog Crónicas Senderistas.

Detalle Petroglifos de Círculos concéntricos

Petroglifos de Venus



Castillo de Otíñar. La estructura que hoy domina el paisaje fue levantada por orden de Fernando III de Castilla tras la conquista de Jaén en 1246. Construido sobre antiguas fortificaciones árabes, el castillo sirvió durante siglos como un punto estratégico crucial para controlar el paso hacia el Reino nazarí de Granada.

Dejaremos el castillo de Otiñar y continuaremos por la pista principal. A nuestra izquierda iremos dejando el Valle del Quiebrajano, con el Pico de la Llana. 

Tras continuar recto en varios de los cruces de pistas que nos encontraremos, nuestro camino se transformará en una senda, que nos irá adentrando en las profundidades de la Sierra Sur. 
La vegetación se irá diversificando cada vez mas, conforme vamos ganando altitud a cada paso. Podremos encontrar, enebros, quejigos, arces, cornicabras, 

Atravesaremos un canchal poblado de quejigos.
Y comienza la subida de verdad, jejej, el desnivel se incrementa por momentos

El Secreto Oculto de la Hoja Caída de Quejigo

¿Sabías que...?

Las agallas discoidales del quejigo (Quercus faginea) no son una enfermedad, sino la cuna de una diminuta avispa cinípida (Neuroterus). Lo más sorprendente es que esta especie tiene un ciclo de vida doble: las avispas que emergen de estas agallas en otoño son solo hembras y se reproducen sin aparearse (partenogénesis). ¡Utilizan el roble como un laboratorio genético estacional!




Y llegamos al Puerto del Paso, zona de unión con la Ruta 2 y desde donde nos separan de la Cueva del Yedrón 2km y 250 metros de desnivel. 

Opción 2. Subida Lineal hasta la Cueva del Yedrón desde el Parrizoso. 

Aparcamos y tomamos una pista que se adentra en la montaña, dejando a la izquierda indicaciones hacia el Quejigo del Carbón. Aquí también se puede dejar el coche si hay sitio. 
Vamos ganando desnivel poco a poco, mientras avanzamos por una cómoda y ancha pista. 
Dejaremos el arroyo de los Miradores. 


En otoño la variedad cromática de la zona nos regalará un abanico de ocres y amarillos difícil de olvidar. 
🍂 Curiosidad botánica

 No hay nada como caminar bajo el dosel de un bosque en otoño, pero ¿alguna vez os habéis preguntado por qué el verde deja paso a esa explosión de ocres y rojizos? La magia tiene una explicación científica: con la llegada del frío y la reducción de horas de luz, los árboles detienen la producción de clorofila, el pigmento verde que domina en verano. Al retirarse el verde, salen a la luz los carotenoides y flavonoides, que ya estaban allí y regalan esos tonos amarillos y anaranjados; mientras tanto, las noches frescas favorecen la producción de antocianinas, las responsables de esos rojos intensos y púrpuras que tanto nos gusta fotografiar en nuestras rutas.


Arce vestido de otoño


Y llegamos al Puerto del Paso, zona de unión con la Ruta 2 y desde donde nos separan de la Cueva del Yedrón 2km y 250 metros de desnivel. 

Opción 1 y 2. Desde el Puerto del Paso hasta la Cueva del Yedrón. 


Dejamos atrás el Puerto del Paso y seguimos por una vereda marcada, que en pocos metros siguiendo hitos de piedra nos lleva a uno de los mejores miradores de la Sierra sur.
Frente a nosotros el Puntal del Matamulos y el refugio de la Cruz de Chimba si nos fijamos bien. 



Al fondo el embalse del Quiebrajano. 
Abandonamos el mirador natural, tras un largo rato disfrutando de las vistas y seguimos la senda en ascenso. 
Y llegaremos a una parte del trazado que tendremos que bajar con precaución, pues la senda está muy usada y desprendida entre la roca y se escurre. En esta zona podremos ver algunas de las formaciones características de figuritas de ajedrez. 


Continuamos entre encinas, pinos y quejigos







Llegamos a una parte donde la senda sube por la roca, si nos fijamos veremos marcas verdosas/amarillentas en las rocas que nos dan orientación de por donde va la senda.

Llegaremos a un árbol con una cruz de enebro, símbolo del camino hacia la Cueva del Yedrón, que nos permitirá saber que vamos bien y que estamos ya cerca. 
Árbol de la cruz en 2020

En 2025 el árbol de la Cruz que ya estaba muerto en 2020, yacía caído em el suelo y la cruz había desaparecido


Pero la cruz ha sido colocada en un pino cercano, por lo que sigue cumpliendo su función
Árbol de la Cruz en 2025


Seguimos ascendiendo y veremos con nuestros ojos la imagen inferior , cuando pasemos por un paso entre las rocas estaremos muy cerca de la Cueva del Yedrón. 

Y al rodear una pequeña curva a la izquierda pasando las rocas anteriores en la senda, aparecerá ante vosotros el paraje de la imagen inferior y en pocos pasos os adentraréis en el paraje de cuento de la Cueva del Yedrón.

No la verás hasta que no estés dentro del recinto, por eso he querido terminar este post con la última imagen que tendrás ante tus ojos antes de internarte en el, a partir de donde surge la magia y surgirá una recuerdo que te acompañará siempre, la primera visión de la Cueva del Yedrón.

¡Afortunado tú que puedes ver y explorar este lugar por primera vez!


Para la vuelta al aparcamiento tienes dos opciones, volver por tus mismos pasos si sigues el track de la ruta número 2 o hacerla circular si sigues el track de la Ruta 1, para ello te adentrarás en una zona llamada "Senda nueva" donde a veces por senda mas marcada y otras por senda algo mas difusa pero sin perdida llegarás nuevamente al Castillo de Otiñar y a los Petroglifos. 

¡tu decides!

¿Porqué no debes publicar imágenes de la Cueva del Yedrón?

Cuando te adentres en el refugio de la Cueva del Yedrón encontrarás un cartel con unas sencillas normas de buen uso del espacio. Son recomendaciones que, en realidad, no deberían hacer falta: lo lógico sería llevarlas siempre presentes, como parte de una educación básica hacia la montaña y hacia quienes vendrán después. Aun así, conviene recordarlas, porque este lugar es frágil y su valor depende, de cómo lo tratemos y cuidemos.

Una de sus normas es por la que he decidido no poner imágenes de este lugar: "No pongas fotos en las redes sociales. Deja la sorpresa de verlo por primera vez a los que vengan". En los tiempos que corren, en plena cultura del post y del "yo estuve allí", puede parecer difícil renunciar a compartirlo todo. Pero quizá ahí esté el verdadero gesto de respeto, tanto para la persona que h construido este lugar y gracias al que podemos disfrutarlo y para el lugar en si.

Guardarte esta experiencia no es egoísmo, es cuidado. Es permitir que otras personas, como tú hoy, lleguen sin expectativas, con la emoción intacta y con esa sorpresa que solo se vive una vez.

⚠️ADVERTENCIA⚠️


Un lugar como la Cueva del Yedrón se comprende mucho mejor cuando es la propia persona que la construyó quien comparte su historia.

En este vídeo podrás ver imágenes de la Cueva del Yedrón. A estas alturas, te recomiendo que pauses aquí la lectura de este post y vuelvas a él después de tu visita. En el vídeo encontrarás respuestas a muchas de las singularidades y curiosidades del entorno, narradas por su propio autor, Javier Herrera.

Hace más de 30 años, Javier dio personalidad a una sencilla gatera bajo una roca. Lo hizo movido por la paz, la soledad, las vistas, los paisajes y la tranquilidad de este lugar, donde es posible una auténtica conexión con la naturaleza. Gracias a él, hoy podemos conocer estos parajes con la excusa perfecta de visitar esta cueva.

¡Gracias Javier, en nombre de toda la comunidad montañera!








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