Arantxa-Santuario de San Juán Xar -Igantzi

No conocíamos Navarra y viviendo en Córdoba, en verano es el mejor momento para cargar maletas y subir a este bonito lugar para conocerlo y disfrutar todo lo posible, para recargar pilas para un nuevo año.

Como base de operaciones estábamos alojados en Goizueta, en el margen del Río Urumea a unas 40 km de San Sebastián, en una casa rural divina pero alejada de toda forma de vida humana, un lugar que emanaba paz, con unas vistas de infarto.

Esta ruta que os proponemos recorre de manera circular la Reserva Natural de San Juan Xar,  conociendo una mágica fuente, una ermita, frondosos bosques  y el único bosque de Carpe de la Península Ibérica. 

Características ruta:

• Nombre: Arantxa-Santuario de San Juán Xar -Igantzi
• Distancia: 9,43km total.
• Duración: 6 horas. Muchas paradas.
• Desnivel: 500 metros
• Dificultad: fácil.

Esta ruta tiene una versión corta que consiste en aparcar en el kilómetro 4,4 que une las localidades de Igantzi con Arantxa, nosotros hicimos la versión larga, 9 km en total, siendo semicircular,

Descripción de la ruta 

Nos desplazamos hacia el municipio de Arantxa, bonito pueblo en el que aparcamos a la entrada y buscamos el sendero que desciende hacia el río Latza. En nuestro descenso las vistas del paisaje agrícola con caseríos nos resultan muy bonitas y diferentes a nuestras campiñas cubiertas de olivos y cereal.

El sendero en su comienzo está empedrado y bien marcado a ambos lados.

Nos vamos adentrando cada vez mas en la frondosidad que implica las cercanías al arroyo.

Aparecen los primeros Robles pedunculados (Quercus robur), característico de esta zona del norte peninsular. Como característica principal para diferenciar esta especie hay que fijarse en que las hojas son sentadas, es decir, no tienen peciolo, mientras que los frutos (bellotas) tienen un peciolo (rabito), bastante largo.

Son varios los caseríos que vamos encontrando...

Llegamos a una zona espectacular, toda una bóveda formada por la vegetación, con rocas en forma de paredes, un pasillo inclinado y bonito como el que mas.

Salimos a un cruce de caminos, nosotros tomamos dirección Igantzi y nos internamos gracias a una pista asfaltada en la vegetación de ribera de los márgenes del río.

Son varios los cercados y huertas que van apareciendo en el margen derecho del camino.

Son variados los helechos que van apareciendo por todas partes

La transparencia de sus aguas nos permiten ver el fondo del mismo y unos reflejos muy artísticos.

Un camino para pasear tranquilamente y olvidarse de las preocupaciones

Llegamos a una pequeña represa, donde los márgenes de la misma parecieran una selva en si misma.

Llegamos a un cruce de caminos, nosotros seguimos recto, a la vuelta tomaremos en este punto dirección Arantza para hacerla semicircular.

La reserva Natural de San Juan Xar fue declarada por el gobierno de Navarra en 1987, en ella se encuentra el único bosque de Carpes de toda la Península Ibérica.

Encontramos los primeros ejemplares de Carpe (Carpinus betulus), no lo habíamos visto nunca y nos ha gustado bastante, es muy parecido al olmo, caduco, pero la base de sus hojas es simétrica y estas son alternas. Este árbol que alcanza los 25 metros de altura en esta zona  es en cierto modo abundante, podemos disfrutarlo antes de llegar a la ermita y en los alrededores de la misma.

Sus frutos son bastante curiosos, en amento.

Dejamos la pista y seguimos a la izquierda por un sendero frondoso, a la derecha se nos queda un bosquete de bambú.

Señales en el sendero nos informa que estamos dentro de la Reserva Natural.

Chlatus ruber

Es una de las setas más inusuales por su forma esférica, que le ha valido el apelativo de Jaula roja. No es comestible, y su interior gelatinoso es rico en manganeso, lo que le otorga un olor repugnante como a carne podrida. La Clathus aprovecha esa peste para atraer a insectos que diseminen sus esporas.

Una pequeña puerta nos invita a entrar a la ermita..¡qué nervios!

"La Ermita, hasta la construcción de la carretera en 1888, se encontraba al lado del viejo camino de Arantza, por el que discurrían los que se dirigían de un pueblo a otro. Desde antiguo ha disfrutado de una devoción especial por parte de los habitantes de toda la comarca, y hoy aún existe una creencia de que sus aguas son curativas (para la piel). Prueba de ello son los trozos de tela y ropas, que la gente después de lavarse con ellos, va dejando durante todo el año alrededor de las tres fuentes de la parte baja de la Ermita"
(Explicación que se puede ver en los carteles indicadores colocados en la Reserva Natural San Juan Xar).

Está todo el suelo de la cueva lleno de frutos de Carpe.

<< sobre este singular paraje, Barandiarán ha escrito " Muchas personas, sobre todo jóvenes, acuden de los pueblos vecinos a la romería que allí se celebra el día 24 de junio y la noche de su víspera. Los que sufren alguna enfermedad cutánea, se bañan en sus aguas, a las cuales atribuyen especial virtud esa noche, y alumbran con velas encendidas, a la imagen de San Juan Txiki, 'San Juan pequeño', que ocupa un nicho abierto en una roca próxima. Las toallas o pañuelos con los que los pacientes se secan después del baño, se dejan en los zarzales vecinos. El sacristán de Yanci se encarga de recogerlos y quemarlos". También recuerdan viejas leyendas que Basajaun vivió en esta cueva >>.

Pasaje extraído del libro Navarra Encantada.

Es curiosa esta fuente y su entorno...

Después de mojarnos bajo la fuente, volvemos a subir las escaleras y retomamos el sendero en dirección a Igantzi.

El sendero que llega a Irantzi, va cogiendo desnivel poco a poco.

¡Maravilla de bosque!

Encontramos fresas silvestres...no las probamos por si acaso..

Vamos paralelos a la carretera, nos queda en la margen derecha, pero no notamos en ningún momento ruidos por su cercanía o cambios en el paisaje, este seguía siendo precioso.

El sendero está estupendamente acondicionado para el uso turístico y no revierte peligro alguno.

¡Quién tuviera estos bosques en Córdoba!

En los márgenes del sendero hay entre otros árboles, grandes robles americanos, son introducidos en España, aún así su presencia aumenta aún mas la belleza del lugar.

Descendemos a la carretera, la cruzamos y tomamos un pequeño sendero a la izquierda, estamos ya muy cerca de Igantxi.

Comienza el ascenso hacia Igantzi, aumenta el desnivel, nos lo tomamos con tranquilidad...

Al acércanos al pueblo comenzamos a ver las zonas de cultivo, mezcladas con bosquetes en las cercanías al mismo.

Me encanta este tipo de paisaje humanizado.

Conectamos con la carretera de acceso al municipio y seguimos por la misma para conocerlo.

Damos un paseo por este cuidado y bonito pueblo, nos tomamos un refresco ( cerca de la iglesia hay un barecito pequeño pero tiene de todo para reponer fuerzas)

Tomamos camino de vuelta, esta vez cogiendo en el desvío dirección Arantza, a la izquierda.

El sendero de subida a Arantza, es inclinado, aunque no nos importa demasiado, lo que lamentamos es que se va acabando la ruta...¡Que penita!

A cada lugar donde miramos, cada foto que haccemos es mucho mas de lo que nunca veremos por nuestra tierra..ains tan bello y ten lejos!!

Como ultima especie que nos llama la atención, encontramos el Abedul, aquí en Navarra se encuentra prácticamente por todas partes, en Andalucía es complicado verlo.

En el centro, fruto del Abedul (Betula pendula)

La corteza de color grisáceo de este árbol es una de sus principales características diferenciadoras.

Pinchando en la imagen inferior podéis acceder al Track de la ruta